Aguacero...

Esta cayendo un aguacero impresionante, creo que aquí aplica ese modismo de “llueven perros y gatos”, pero no le temo a la lluvia, tengo una sombrillita, es más tengo dos, porque una la traigo en la bolsa y la otra la dejo en el CCA por si alguna vez olvido la de la bolsa “uno nunca sabe”, así que puedo salir del CCA con tranquilidad, tengo mi sombrillita. Les recuerda a algún pasaje de algún libro mi situación? Si no les recuerda nada, deben leer más y si les recuerda algo distinto al pasaje de “El Principito” donde su flor le dice que tiene sus cuatro espinas para defenderse de los tigres, entonces deben leer El Principito! Y exactamente así de tiernamente ridícula me sentí con mi sombrillita, porque aun con ambas (la de la bolsa y la de emergencia) si me atrevo a salir del edificio terminaré hecha una sopa, así que mejor seguiré en lo que estaba haciendo antes de notar que tan absurda puede ser la existencia de las sombrillitas.

Si les cae el aguacero encima, tomen un bañito caliente, un chocolatito caliente y abríguense para dormir, si no lo hacen no les pasará nada, pero si lo hacen disfrutarán el baño, el chocolate y la cama.

Figura
Más me mojó ella que el aguacero. No volveré a ceder la acera.
Alfredo Greñas (1857- 1949)
"El Barbero", abril 24 de 1892. Xilografía, 145 x 9.5 cms.