Días sin post
Ya es noviembre, tan pronto, tan sorprendente como vuela el tiempo de momento, como agarra impulso y sale corriendo más rápido de lo que lo podemos ver y por supuesto más rápido de lo que podemos correr nosotros mismos. Hace más o menos 15 días puse el último video en el blog y en un abrir y cerrar de ojos se nos fueron unos cuantos post a la Diva y a mí. No argumentaré el exceso de trabajo ni el puente de "Todos Santos", aunque sería totalmente cierto, mejor en lugar de eso escribiré lo que me habría gustado escribir estos días, lo que se me quedó en la mente y no encontró una computadora a tiempo antes de entrar en la carpeta de pendientes.
Me habría gustado escribir sobre los festejos de Día de Muertos, el altar a los difuntos, los olores del cempazuchitl, las guayabas, el champurrado y la calabaza en dulce, sobre los colores del papel picado, las frutas, las ollas y los jarros, sobre el sabor de las lunetas, las calaveritas, las mandarinas y el infaltable pan de muerto, me habría gustado poner una foto, que por cierto no tomé y que como todas las fotos no tomadas es ya una foto perdida. Habría dedicado un post al festival de muertos en Xalapa, al circuito de obras de teatro cortas alrededor de los lagos y de como chocaron contra mi mente una trás otra distintas formas de ver la muerte, distintas formas de concebir el arte y distintas, muy distintas formas de entender a los autores; habría incluido en ese post la agradable sensación de caminar en la noche joven entre las catrinas que deambulaban por el paseo presentes y lejanas y a veces tan presentes que obsequiaban una que otra palabra u objeto a los paseantes del presunto camposanto.
Quiza en otro post habría hecho algún comentario sarcastico respecto al cambio climático que agarró por sorpresa a los tabasqueños y que se llevó absolutamente todo, sus casas, sus ropas, sus muebles y sobre todo su tranquilidad, lo que extrañamente no se pudo llevar fue a los gobernantes corruptos que dieron carpetazo a las que en aquel entonces habrán sido futuras necesidades de adaptación ante un cambio climático que no es como la leyenda de Pedro y el Lobo, hago la aclaración por si alguén aún tenía sus dudas.
Me habría gustado también hacer toda una reseña de la luna de Octubre, la más hermosa de todas y de como la frase tiene tanto de cierto como de cientificamente comprobable y es que como no va a parecernos más hermosa si de tan grande parece que se sostiene en el cielo agarrada con alfileres, quizá habría escrito un poco sobre el perihelio, sobre la cercania de la Luna a la Tierra, sobre el conejo mal entendido o mal explicado o mal visto o algo que el caso es que como si no fuera suficiente que cada uno de nosotros tiene su propia Luna, además cada uno tiene su propio conejo de la Luna o cada uno su conejo ausente.
Hay algunos post más, que afortunadamente son atemporales, que sigo teniendo en la mente y que en algún momento verán la luz, espero que pronto y que ojala no se hayan hecho un poco viejos o las ideas un poco añejas por el paso de las horas guardados en la mente.
Me habría gustado escribir sobre los festejos de Día de Muertos, el altar a los difuntos, los olores del cempazuchitl, las guayabas, el champurrado y la calabaza en dulce, sobre los colores del papel picado, las frutas, las ollas y los jarros, sobre el sabor de las lunetas, las calaveritas, las mandarinas y el infaltable pan de muerto, me habría gustado poner una foto, que por cierto no tomé y que como todas las fotos no tomadas es ya una foto perdida. Habría dedicado un post al festival de muertos en Xalapa, al circuito de obras de teatro cortas alrededor de los lagos y de como chocaron contra mi mente una trás otra distintas formas de ver la muerte, distintas formas de concebir el arte y distintas, muy distintas formas de entender a los autores; habría incluido en ese post la agradable sensación de caminar en la noche joven entre las catrinas que deambulaban por el paseo presentes y lejanas y a veces tan presentes que obsequiaban una que otra palabra u objeto a los paseantes del presunto camposanto.
Quiza en otro post habría hecho algún comentario sarcastico respecto al cambio climático que agarró por sorpresa a los tabasqueños y que se llevó absolutamente todo, sus casas, sus ropas, sus muebles y sobre todo su tranquilidad, lo que extrañamente no se pudo llevar fue a los gobernantes corruptos que dieron carpetazo a las que en aquel entonces habrán sido futuras necesidades de adaptación ante un cambio climático que no es como la leyenda de Pedro y el Lobo, hago la aclaración por si alguén aún tenía sus dudas.
Me habría gustado también hacer toda una reseña de la luna de Octubre, la más hermosa de todas y de como la frase tiene tanto de cierto como de cientificamente comprobable y es que como no va a parecernos más hermosa si de tan grande parece que se sostiene en el cielo agarrada con alfileres, quizá habría escrito un poco sobre el perihelio, sobre la cercania de la Luna a la Tierra, sobre el conejo mal entendido o mal explicado o mal visto o algo que el caso es que como si no fuera suficiente que cada uno de nosotros tiene su propia Luna, además cada uno tiene su propio conejo de la Luna o cada uno su conejo ausente.
Hay algunos post más, que afortunadamente son atemporales, que sigo teniendo en la mente y que en algún momento verán la luz, espero que pronto y que ojala no se hayan hecho un poco viejos o las ideas un poco añejas por el paso de las horas guardados en la mente.
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